martes, 14 de abril de 2015

NÚCLEO DE IDENTIDAD PERSONAL

"El núcleo de identidad personal (NIP) ,por un lado, es la respuesta ante la pregunta ¿Quien soy ? y por otro lado, constituye la base sobre la cual descansa todo nuestro modo de ser.

En este blog encontraras conceptos y definiciones que te servirán para la vida diaria y asi tener conocimientos de tu ser, y tener conciencia de las circunstancias de nuestros propios datos, al igual que conocer las interpretaciones de nuestra mente.

STATUS

EL STATUS
¿Quién eres?, la mayor parte de la gente responde con su
nombre o apodo. Sin embargo, ni el nombre ni el apodo constituyen la
identidad más íntima de una persona. 
La identificación con una figura paterna o
materna es un proceso normal en el desarrollo del niño. La deficiencia acontece cuando ese
niño no logra deshacerse de dicha identificación en etapas ulteriores de su evolución.

La riqueza y, en general, las propiedades, suelen formar parte del status, al
mismo tiempo se utiliza como medios para obtener otros beneficios.
 Dada su eficacia y su
objetividad tan claramente detectable, los bienes económicos se han convertido en la meta
final de muchas personas. 
El status es fuente de aprecio y de reconocimiento, la gente suele estar
ansiosa por adquirir un mayor status, lo cual puede ser completamente sano, siempre y
cuando no se altere una correcta jerarquía de valores y no se despoje al núcleo de identidad
personal de sus derechos. 

FUNCIONES DESEMPEÑADAS

La ocupación estable de una persona le da ciertas características que luego tiende
a defender como algo muy propio y personal. Hay personas que se ofenden si no lo llaman
Ingeniero, Doctor o Licenciado.
La consecuencia es lógica, el trato interpersonal se convierte en un trato puramente funcional,
que deja a un lado las necesidades más íntimas de esas personas.





APÈNDICE: CONSECUENCIAS DE LA EXPERIENCIA COTIDICANA DEL NUCLEO DE IDENTIDAD PERSONAL

Las características  o cualidades  de una persona desarrollada han sido descritas por Psicólogos como  Maslow y Rogers.

La Filosofía oriental habla de un desarrollo del núcleo de identidad personal.


Autenticidad
Es lo contrario de la alineación , que seria la mutilación o separación a un elemento esencial de la persona.
La mas fuerte alineación puede tener una persona es la separación con respecto a su propio núcleo de identidad personal.

Dinamismo de crecimiento
La persona esta abierta a su experiencia intima: saber reconocer con facilidad las emociones y vivencia que tiene.

Expansión de la conciencia
El marco donde percibe sus vivencias es mayor y esto lo capacita para resolver sus problemas ordinarios de la vida.
Con un marco estrecho no es capaz de ver soluciones, con un marco amplio es mas fácil captar el dato.

Potencialidades avivadas

 La persona tiene sus propias potencialidades y aptitudes en forma mas asequible.

Desarrollo del valor moral
La persona actúa mas rectamente; sus actitudes son mas conformes con la naturaleza.

Amor de benevolencia


Parte del yo profundo, surge el amor desinteresado.

Magnanimidad
La virtud por la cual una persona se lanza a grandes obras en beneficio de la comunidad.

                       





lunes, 13 de abril de 2015

LA ESENCIA DEL NÚCLEO DE IDENTIDAD PERSONAL

Algunas experiencias conducen al núcleo de identidad personalson meras expresiones abstractas, que tratan de identificar y señalar ese núcleo. El concepto y el conocimiento conceptual es diferente a la vivencia, o mejor dicho, es una vivencia muy pobre. La belleza emocional; mas no así el concepto de belleza.. 
El núcleo de identidad personal está abierto al cambio, pues él mismo es la base de todo cambio.

          El ser substancial 
El  substancial, Se opone al ser accidental. La substancia, en Filosofía, significa el ser que existe
en sí mismo, y por tanto, ofrece una permanencia radical en relación con los accidentes, (todo
aquello que existe en otro, en la substancia). 
Calidad de sujeto

La identidad personal es lo opuesto a un objeto. Objetivar a una persona es lo mismo que
desfigurar la o tratarla en un nivel inferior.

Las cosas son objetos, los conceptos son objetos, y hasta los animales pueden ser tratados
 como objetos. Pero la identidad personal es justamente lo opuesto. 

La palabra objeto significa "lo que está frente a mi". Objetivar algo es retirarlo y verlo en 
  cierta perspectiva y con cierta distancia.
Los conceptos objetivan lo que expresan, y por esa razón no son aptos para conocer esta 
  identidad personal. Es importante aclarar que el acto de reflexionar sobre uno mismo 
  implica un conocimiento discursivo, conceptual, y, por tanto, objetivo.
El yo profundo 
Este concepto hace alusión a dos tipos de yo. En nuestro esquema básico de los dos círculos 
concéntricos, es posible representar al yo profundo y al yo superficial.
El yo profundo es el círculo central interno, y el yo empírico es la corona o periferia de la
persona. El ego es reconocido de inmediato en una persona. El egoísmo o actitud posesiva es
su característica más notable. Tiene una tendencia centrípeta, es posesivo. En cambio, el yo
profundo es difusivo, expansivo, centrífugo, desinteresado.

La integración de una persona tiene su raíz en este yo profundo. La diversidad de funciones,
  emociones, problemas y estratos de una persona, requiere una estructuración o integración,
 de tal manera que se trate realmente de una persona. Esta integración tiene lugar
 precisamente en el yo profundo.

•  Un fortalecimiento del yo profundo capacita a la persona para resistir, con más facilidad, las
    crisis y las situaciones cambiantes de la vida. En realidad, la vida es un continuo cambio, y el
   miedo al cambio puede ser paralizante para aquella persona que no tiene esa plataforma
   interna suficientemente estable.


Campo de conciencia 

Conciencia quiere decir darse cuenta de algo. Cada persona puede constatar el flujo de la
 conciencia, como un continuo pasar de objetos, recuerdos, emociones, que de alguna manera
 se hacen presentes. La principal propiedad de la conciencia es la intencionalidad, que consiste
 en que siempre se trata de una conciencia- de- algo.
El sujeto que experimenta dicho cambio de conciencia, al mismo tiempo vive un silencio, paz, 
armonía, felicidad y sensación de ilimitación, que es una vivencia superior a los momentos de 
alegría y placer que se encuentran en la vida ordinaria.
La esencia de la felicidad es un estado que surge a partir del núcleo de identidad 
 personal y difunde su tónica en el resto de las experiencias cotidianas. Por último, 
  podríamos asociar esta idea del campo de conciencia con el concepto de espíritu
  y de se-cabe-sí que se maneja en la Metafísica







COMUNICACIÓN INTRAPERSONAL

Es un encuentro con uno mismo.
Este tipo de experiencia tiene una ventaja sobre las demás no se requiere a ninguna otra persona u objeto.

las técnicas o procedimientos para sistematizar esta experiencia han sido elaboradas y expandida por la filosofía oriental.
como el yoga, el zen y demás tipos de meditación.


la meta es el encuentro con uno mismo.

   características:

  • expansión de la conciencia
  • relajamiento y descansó profundo
  • la palabra trascender puede describir esta experiencia  




COMUNICACIÓN INTRAPERSANAL

la vibración emocional es típica y tiene varios nombres y grados, una simple amistad, puede ser afecto, cariño o amor, puede ser empatía, o acto de ponerse en los zapatos del otro.


produce relajamiento o ausencia de tensión.
Por su ambiente flexible,cálido,y sin palabras ni esfuerzos intelectual alguno.


cuando más se reconoce la calidad de persona del otro, más se crece la calidad de persona de uno mismo.

domingo, 12 de abril de 2015

IDEAS, PRINCIPIOS Y VALORES



Existen personas que llagan a identificarse con sus ideas, sus principios y sus valores.  El descubrimiento de un valor, supone una profundización y maduración de la propia persona. El núcleo de identidad personal, es aquello que capta y posee esos valores, que produce una especial luminosidad como condición de posibilidad de todo lo axiológico. Es importante insistir en que ni las ideas ni los valores constituyen a la persona, sino, son complementos con los cuales una persona crece, se desarrolla y se realiza como tal.
Rasgos psicológicos
No es raro encontrar personas que se identifican con sus rasgos psicológicos. Entre éstos podemos considerar varios tipos.
En primer lugar, el automatismo que se ha formado a través del tiempo, de tal manera que respondemos de un cierto más o menos fijo y previsible.
En segundo lugar, podemos considerar otros la conducta que están más profundamente arraigados y que tienen su origen en una serie de manipulaciones inconscientes que tuvieron lugar durante la infancia.
En tercer lugar, podemos detectar algunos rasgos que se llaman del carácter o del temperamento con los que es muy frecuente la propia identificación, como si no pudieran cambiarse o modificarse.
En cuarto lugar, trataremos el auto-concepto, como uno de esos rasgos que más nos afectan a lo largo de la vida y que es la creencia acerca de lo que uno es.
En quinto lugar, estudiaremos brevemente el inconsciente como uno de esos rasgos que parecen dominar nuestra conducta, como si fuera el fondo más propio de la persona.


a) Mecanismos en la respuesta: Es cuando una persona trata de justificar su modo de reaccionar ante un estímulo diciendo que "así es él", podemos comprender que tan sólo se trata de un mecanismo en la respuesta, tal vez hondamente arraigado, pero que de ningún modo excluye una posibilidad de cambio.
El cambio de estructura en las respuestas que emite una persona ante determinados estímulos es un proceso real de aprendizaje, estudiado, cultivado y promovido por la corriente del conductismo.
Existen personas que se irritan fácilmente con la menor broma, otros reaccionan con mucho miedo ante un grito de un superior.

La consecuencia de todo esto es que los mecanismos concretos que tenemos o padecemos no constituyen nuestro más íntimo ser, sino que, por el contrario, a partir de nuestro fondo personal podemos planear y realizar cambios, aun en lo que ya está automatizado o mecanizado en nuestra conducta cotidiana.
b) Condicionamientos inconscientes. Se trata de una automatización en las respuestas, sólo que ahora el aprendizaje ha sido completamente inconsciente, posiblemente desde la primera infancia, se arraiga con mucha mayor fuerza en el organismo, originando así la estructura de estímulo-respuesta es un elemento constitutivo de nuestra personalidad.
Así es como la gente aprende a comportarse en forma extraña y exagerada, pues se come las uñas. Puede ser que aprenda a comportarse con excesiva prisa y nerviosismo, o tienda a ocultar sus emociones, o trate de captar la atención y la admiración de quienes la rodean.
c) Carácter y temperamento. Suele distinguirse una diferencia entre estos dos conceptos. El temperamento comprende una serie de rasgos psíquicos estables en la persona, originados a partir de características biológicas que suelen ser heredadas. El temperamento colérico o sanguíneo son ejemplos típicos descritos desde antiguo. Existen varias clasificaciones de las personas en cuanto a su temperamento, tomando en cuenta, por ejemplo, la capacidad de percepción, la capacidad de afecto y el tiempo que permanece el estímulo recibido.
Los rasgos temperamentales están controlados por el funcionamiento hormonal y actualmente es posible conseguir un considerable cambio en dicho funcionamiento. Son elementos que, por más estabilidad que muestre, todavía no forman parte de la substancia humana.
 
d) El autoconcepto. El autoconcepto, es el conjunto de creencias que una persona tiene acerca de lo que es él mismo. Cada sujeto se ha ido formando, a lo largo de su vida, una serie de ideas e imágenes que parecen corresponder a su propia estructura de un modo más o menos permanente y necesario.
Una de las más importantes propiedades del autoconcepto es su poder tan fuerte sobre la voluntad y las tendencias del mismo sujeto. Si una persona cree que no es apta para Matemáticas, aunque tenga cualidades para ellas, de hecho será inútil para esa disciplina.
El autoconcepto sólo funciona como una mera creencia o conjunto de creencias. La realidad, que los psicólogos se han encargado de demostrar, es precisamente lo contrario, o sea, el autonconcepto (tenga o no bases reales), es el que proporciona un cierto carácter de fijeza en la conducta de una persona.
Existen, una cierta dialéctica entre el autoconcepto y la conducta de una persona, a medida que el autoconcepto origina conductas cada vez más frecuentes, acordes con las características expresadas en ese autoconcepto, a su vez, dichas conductas, así realizadas, van fortificando ese autoconcepto.
e) El inconsciente. Desde el punto de vista de la Antropología filosófica, nos interesa explicitar qué relación existe entre el inconsciente y el núcleo de identidad personal.
Entendemos por inconsciente, que es un conjunto de imágenes, valores, conceptos, emociones y mecanismos de respuesta, que de alguna manera subyacen en la persona, pero que ordinariamente no aparecen a la conciencia, e inclusive ofrecen resistencia a ello, aun cuando suelen manifestarse fortuitamente en los sueños, los actos fallidos y las asociaciones libres.
Como contenido, el inconsciente es muy variable; algunos elementos que lo forman pueden ser maléficos y otros pueden ser benéficos. No solamente se hallan traumas, sin también experiencias positivas y orientadoras hacia un sano crecimiento.








LAS FUNCIONES DESEMPEÑADAS




La ocupación estable de una persona le da ciertas características que luego tiende a defender como algo muy propio y personal.
El problema del cambio de identidad de una profesión. Por ejemplo, el profesor que considera su principal función como la de catedrático, y así se ha  desempeñado durante varios años. Ese profesor debe cambiar su identidad, tendrá que complementarse con otros recursos que no son fáciles de aprender. En la periferia es rechazado con facilidad por las personas que toman muy en serio su identificación como catedrático.


Un cargo especial en una institución, como el de presidente o director de una sección o departamento, o bien, el rol de madre, abuela, sacerdote o consejero, también pueden constituir una característica especialmente preferida que se llega a instalar en el núcleo de la persona como si fuera su esencia más íntima. Esta sustitución del núcleo de identidad personal puede llegar a ser un verdadero rebajamiento de la calidad de persona de un jefe. La gente trata a esa persona tan  sólo en su calidad de jefe, y no hace caso a su aspecto propiamente personal. El mismo jefe se torna defensivo, respecto a su categoría, dado que ve allí una fuente de reconocimiento y aprecio y tiende a olvidarse de su propia calidad de persona. El trato interpersonal se convierte en un trato puramente funcional, que deja a un lado las necesidades más íntimas de esas personas.